¿PUEDE ALGUIEN SER ADVENTISTA Y AL MISMO TIEMPO RECHAZAR A ELENA WHITE COMO PROFETA?

¿PUEDE ALGUIEN SER ADVENTISTA Y AL MISMO TIEMPO RECHAZAR A ELENA WHITE COMO PROFETA?

Varias me han hecho esta misma pregunta, y La responderemos a continuación: Pero aquí pueden haber tres posibles problemas graves y terribles.

1— La persona que dio el estudio de la fe de Jesús, paso por alto la lección #15 que habla de los dones espirituales y el don de profecía (1 Corintios 12:7-10)

2— La persona que rechaza el ministerio de Elena White, desconoce cuál es la función del Espíritu de profecía en la iglesia remanente, y es de conducirnos a las Escrituras como norma de regla, conducta y práctica (2 Crónicas 20:20).

3— Esta persona que desea ser Adventista, y rechaza el Espíritu de Profecía, nunca se ha tomado la tarea de leer con una mente fresca y clara, y sin prejuicio algún libro de Elena White. Decimos esto porque la mayoría de gente dentro de la iglesia son ignorantes respecto al contenido de esos libros.

AÚN NO SON ADVENTISTAS

Los profesos Adventista que dicen serlo, pero al mismo tiempo rechazan el Espíritu de profecía, aún no les ha amanecido (Isaías 8:20), ya que una de las características de la iglesia remanente es tener el Testimonio de Jesús (Apocalipsis 12:17), que es el Espíritu de profecía (Apocalipsis 19:10), Dios jamás dejará a su iglesia sin dirección de este don (Proverbios 29:18; 1 Corintios 1:7).

ELENA WHITE HABLA DE SU RECHAZO COMO PROFETA

Esto ha sido muy común dentro de la historia del Adventismo, durante toda la historia se han levantado profesos Adventistas negando el ministerio de Elena White como mensajera del Señor, en este contexto texto escribió ella:

“Si los Testimonios no hablan según la Palabra de Dios, rechazadlos. No puede haber unión entre Cristo y Belial”.—Joyas de los Testimonios 2:302. – {3MS 35.2}

“Hay una clase de personas a quienes les gusta este tipo de alimento. Se alimentan de carroña; no miran cándidamente para ver qué bien han hecho mis escritos y mis testimonios, sino que, a semejanza de Satanás, el acusador de los hermanos, tratan de ver qué mal pueden hallar, qué agravio pueden hacer, qué palabra pueden tergiversar y poner su construcción malvada sobre ella, para hacerme un falso profeta...” – {3MS 401.7}

“Veo el espíritu satánico más claramente desarrollado que lo que se ha manifestado durante los cuarenta años pasados”.—Carta 3, 1883. – {3MS 402.1}