LOS 144,000 Y LA ÚLTIMA GENERACIÓN. ¿Cómo Serán?

LOS   144,000   Y   LA   ÚLTIMA   GENERACIÓN.  ¿Cómo Serán?

Durante más de 50 años se ah discutido el tema de la última generación en la IASD, desde la publicación del famoso libro Questions On Doctrine.  Mientras algunos dicen que pecaremos hasta el mismo día de la venida de Cristo, otros, dicen que sí es posible vencer la tentación y por ende, al pecado y que habrá una generación cuyo carácter refleje plenamente el carácter de Cristo.

Para empezar, ésta segunda idea forma parte del adventismo histórico, no la primera, lo que quiere decir que, lo que realmente creían los pioneros adventistas y la misma hna White, era que habrá una generación que reflejará plenamete el carácter de Cristo en sus vidas y por ende vencerá toda tentación teniendo sus miradas fijas en Cristo.  La pregunta es:  ¿Enseña la Biblia que si se puede vencer el pecado? 

Muchos usan Romanos capitulo 7 para sostener que no se puede vencer el pecado, lo cierto es que si nos fijamos en la estructura del capítulo, lo que Pablo hace  es: decir que 1._ No es suficiente estar convencido de la excelencia de la ley ni reconocer la sabiduría y justicia de sus requerimientos, ni tampoco es suficiente asentir que son buenos sus preceptos o aun deleitarse en ellos. 

2._ Ninguna cantidad de intenso esfuerzo de obediencia servirá para superar la ley del pecado en los miembros, a menos que el pecador rebelde se entregue a Cristo por fe. (CBA)

Y es los que el verso 25 afirma al decir que por nosotros mismos lo único que podemos hacer es servir  a la ley del pecado  Ro 7:25: "25 ¡Gracias doy a Dios, por nuestro Señor Jesucristo! Así, DEJADO A MÍ MISMO, con la mente sirvo a la Ley de Dios, pero con la carne a la ley de pecado.*"

Sin embargo, las declaraciones de Pablo no quedan ahí, sino que continúan en el capítulo 8.

Ro 8:2-4: "2 porque mediante Cristo Jesús, la ley del Espíritu que da vida, ME HA LIBRADO de la ley del pecado y de la muerte.*

3 Porque lo que era imposible a la Ley, por cuanto era débil por la carne; Dios, al enviar a su propio Hijo en semejanza de carne de pecado, y como sacrificio por el pecado, condenó al pecado en la carne;*

4 PARA QUE LA JUSTICIA QUE QUIERE LA LEY SE CUMPLA EN NOSOTROS, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu." 

En este contexto Pablo continúa hablando de la ley, que él aprobaba (Rom 7:16) y en la cual se deleitaba (Rom 8:22); pero descubrió que era incapaz de obedecerla sin Cristo.

Dios envió a su Hijo en semejanza de carne de pecado para que los hombres pudieran ser plenamente capacitados para cumplir con las justas exigencias de su santa ley. El propósito del plan de salvación es poner la vida del hombre en armonía con la voluntad divina. 

...Cristo vino para hacer posible que el hombre prestara perfecta obediencia {...} Dios requiere perfecta obediencia de sus hijos, y la perfecta vida de Cristo en su humanidad es la seguridad de Dios para nosotros de que mediante su poder también podemos alcanzar la perfección de carácter (ver PVGM 255-256; HAp 423). (CBA).

En fin,  el capítulo 8 de Romanos se la pasa presentando un amplio contraste entre vivir según el Espíritu y vivir según nuestra naturaleza pecaminosa (vivir según la carne)

También,  otros textos nos dicen qué: 

1Jn 3:6: "6 Todo el que permanece en él, no sigue pecando. El que sigue pecando, no lo ha visto, ni lo ha conocido."

1Jn 3:9: "9 Todo el que ha nacido de Dios, no sigue pecando, porque la vida de Dios está en él. No puede seguir pecando, porque ha nacido de Dios."

1Jn 5:18: "18 En cuanto a nosotros, sabemos que todos los que han nacido de Dios no siguen pecando, pues el Hijo de Dios los protege y los mantiene lejos del alcance del maligno."

Sabiendo ésto, podemos entender mejor lo que la Biblia enseña sobre los 144,000, los salvos que estarán vivos para ver el regreso de Cristo,  cuando de ellos se dice: "SON SIN MANCHA" (Apoc.14:5) {del Griego. ἄμωμος "ámōmos", “sin defecto”, “sin culpa”,  cognado de la palabra ἀμώμητος "amómetos" que significa irreprensible"}   Estos entonan un canto que ninguna otra compañía puede aprender, porque ese canto será el canto de su experiencia personal  y su victoria.  Ellos habrán vivido sin intercesor después del fin del tiempo de gracia, pues Cristo no estará más mediando, sino que habrá pronunciando las palabras:  "El que es injusto, sea injusto todavía; y el que es inmundo, sea inmundo todavía; y el que es justo, practique la justicia todavía; y el que es santo, santifíquese todavía." (Ap 22:11).  Por lo que, después del cierre de la gracia ya no habrá más perdón de pecados,  así que sería contradictorio decir que aún los que han de ser sellados seguirán pecando hasta la misma venida de Cristo.

Nota:   muchos ven en la teología de la última generación algo legalista y perfeccionista, piensan que decir que sí se puede alcanzar la perfección de carácter, es equivalente a decir que no necesitaremos de Cristo para subsistir, los tales aún no han comprendido el verdadero mensaje,  pues la teología de la última generación no enseña que el ser humano pueda llegar a un estado de carne santa antes de la venida de Cristo y por consiguiente no necesitará de Cristo en la hora más difícil,  sino todo lo contrario,  enseña que los que han de ser salvos y han de ver a Cristo viniendo en las nubes, aún poseerán su naturaleza caída, pero  estarán tan unidos y aferrados con Cristo, que cuando se les presente la tentación, podrán resistirla, pues en su mente se preguntarán:  los que hemos muerto al pecado, ¿cómo viviremos aún en él?" (Ro 6:2).

ALGUNAS DECLARACIONES DEL ESPÍRITU DE PROFECÍA AL RESPECTO.

Dios tendrá un pueblo celoso para las buenas obras, firme en medio de las contaminaciones de esta época de degeneración. Habrá un pueblo cuyos miembros se aferrarán de tal manera a la fuerza divina que podrán resistir a toda tentación. Los malos anuncios que se ven en carteles llamativos pueden tratar de hablar a sus sentidos y corromper su mente, pero estarán de tal manera unidos con Dios y los ángeles que serán como quienes no ven ni oyen. Tienen que hacer una obra que nadie puede hacer por ellos, la cual consiste en pelear la buena batalla de la fe y echar mano de la vida eterna. No tendrán confianza en ellos mismos, ni suficiencia propia. Conociendo su debilidad, unirán su ignorancia a la sabiduría de Cristo, su debilidad a su fuerza.

Los jóvenes pueden tener principios tan firmes que las más poderosas tentaciones de Satanás no podrán apartarlos de su  fidelidad.  3TI 518.3 - 3TI 518.4

. "Estos (los 144,000) son los que han venido de grande tribulación"; han pasado por el tiempo de angustia cual nunca ha sido desde que ha habido nación; han sentido la angustia del tiempo de la aflicción de Jacob; han estado sin intercesor durante el derramamiento final de los juicios de Dios. Pero han sido librados, pues "han lavado sus ropas, y las han blanqueado en la sangre del Cordero". "En sus bocas no ha sido hallado engaño; están sin mácula" delante de Dios. "Por esto están delante del trono de Dios, y le sirven día y noche en su templo CS 630.3.

Un carácter formado a la semejanza divina es el único tesoro que podemos llevar de este mundo al venidero.—Palabras de Vida del Gran Maestro, 267 MPu 325.3.

Cristo llevó una vida de perfecta obediencia a la ley de Dios, y así dió ejemplo a todo ser humano. La vida que él llevó en este mundo, tenemos que llevarla nosotros por medio de su poder y bajo su instrucción. MC 135.3

El Salvador llevó sobre sí los achaques de la humanidad y vivió una vida sin pecado, para que los hombres no teman que la flaqueza de la naturaleza humana les impida vencer. Cristo vino para hacernos "participantes de la naturaleza divina," y su vida es una afirmación de que la humanidad, en combinación con la divinidad, no peca.

El Salvador venció para enseñar al hombre cómo puede él también vencer.  MC 136.1 - MC 136.2

“Los que reciban el sello del Dios vivo y sean protegidos en el tiempo de angustia deben reflejar

plenamente la imagen de Jesús” ( Primeros escritos, p. 71).

Él (Jesús) no consentía con el pecado. Ni por un pensamiento cedía a la tentación. Lo mismo se 

puede dar con nosotros... Dios nos toma la mano de la fe, y la lleva a apoderarse firmemente de la 

divinidad de Cristo, a fin de que alcancemos la perfección de carácter. Y la manera como eso se realiza, Cristo nos la mostró. ¿Por qué medio venció en el conflicto contra Satanás? Por la Palabra de Dios. Únicamente por la Palabra pudo resistir a la tentación. ‘Está escrito’, decía” (DTG 123).

“𝗠𝘂𝗰𝗵𝗼𝘀 𝘀𝗲 𝗲𝘀𝘁á𝗻 𝗲𝗻𝗴𝗮ñ𝗮𝗻𝗱𝗼 𝗮𝗹 𝗰𝗿𝗲𝗲𝗿 𝗾𝘂𝗲 𝗲𝗹 𝗰𝗮𝗿á𝗰𝘁𝗲𝗿 𝘀𝗲𝗿á 𝘁𝗿𝗮𝗻𝘀𝗳𝗼𝗿𝗺𝗮𝗱𝗼 𝗰𝘂𝗮𝗻𝗱𝗼 𝘃𝗲𝗻𝗴𝗮 𝗖𝗿𝗶𝘀𝘁𝗼; pero cuando él aparezca no se convertirán los corazones. 𝗧𝗲𝗻𝗱𝗿𝗲𝗺𝗼𝘀 𝗾𝘂𝗲 𝗵𝗮𝗯𝗲𝗿𝗻𝗼𝘀 𝗮𝗿𝗿𝗲𝗽𝗲𝗻𝘁𝗶𝗱𝗼 𝗱𝗲 𝗻𝘂𝗲𝘀𝘁𝗿𝗼𝘀 𝗱𝗲𝗳𝗲𝗰𝘁𝗼𝘀 𝗱𝗲 𝗰𝗮𝗿á𝗰𝘁𝗲𝗿 y tendremos que haberlos vencido por la gracia de Cristo 𝗱𝘂𝗿𝗮𝗻𝘁𝗲 𝗲𝗹 𝘁𝗶𝗲𝗺𝗽𝗼 𝗱𝗲 𝗴𝗿𝗮𝗰𝗶𝗮”. HC, 288.

No hay nada que Satanás tema tanto como que el pueblo de Dios despeje el camino quitando todo impedimento, de modo que el Señor pueda derramar su Espíritu sobre una iglesia decaída y una congregación impenitente .... Cada tentación, cada influencia opositora, ya sea manifiesta o secreta, puede ser resistida con éxito, "no con ejército, ni con fuerza, sino con mi Espíritu, ha dicho Jehová de los ejércitos".  EUD 164.4